El 10 de febrero, los Estados miembros de la UE acordaron un mandato de negociación para la propuesta de Reglamento de e-Privacy, que permite al Consejo iniciar las conversaciones con el Parlamento Europeo sobre el texto final. El acuerdo constituye un hito importante hacia la puesta en marcha de una regulación actualizada. IAB Spain, y la industria publicitaria europea, acoge con satisfacción este progreso y la posibilidad de un diálogo tripartito productivo en los próximos meses.
La publicidad digital sigue siendo la principal fuente de ingresos que financia la prensa y los medios de comunicación libre y diversos de Europa. Representa el 81% de los ingresos digitales de los medios de comunicación en la Unión Europea, lo que permite a los ciudadanos acceder a contenidos y servicios fiables y de alta calidad.
Un diálogo tripartito productivo y exitoso debería conducir a un texto final que brinde una protección sólida de la privacidad y que a la vez permita que los medios y otros contenidos y servicios online continúen dependiendo de un flujo de ingresos publicitarios. En la primera lectura de la propuesta, finalizada en 2017, el Parlamento Europeo propuso prohibir el condicionar el acceso a los servicios, de manera que otorgaba a los usuarios un derecho por ley a consumir todos los medios y otros contenidos del sitio web de forma gratuita, expropiando así el trabajo de los editores.
Consideramos evidente que un enfoque de este tipo socavaría la sostenibilidad de los medios y otros servicios que los consumidores utilizan todos los días. IAB Spain espera que el nuevo Parlamento adopte un enfoque más equilibrado desde la sólida base proporcionada por el RGPD.
Mientras las instituciones de la UE se preparan para los diálogos tripartitos, desde IAB Spain destacamos respetuosamente la necesidad de tener muy en cuenta tanto el RGPD como la jurisprudencia que ha surgido desde su aplicación en 2018. En ese sentido, es alarmante ver que el Supervisor Europeo de Protección de Datos (EDPS) sugiere una prohibición total de la publicidad dirigida para abordar el problema del uso de datos con fines publicitarios cuando se han recabado con otros fines. Conviene recordar que tal comportamiento ya es ilegal según la normativa existente.
Del mismo modo, el EDPS pide restricciones sobre los datos que pueden tratarse para anuncios dirigidos o la comunicación de esos datos a anunciantes o terceros. Algo, también difícil de entender, ya que tales restricciones ya existen en el RGPD, donde, por ejemplo, los datos de categorías sensibles requieren una legitimación específica y cuyo uso se permite por la gran mayoría de la industria publicitaria y, sobre todo, a través el estándar de cumplimiento de la industria, el Marco de Transparencia y Consentimiento (TCF en sus siglas en inglés).
Desde IAB Spain esperamos que los próximos pasos se mantengan para lograr un equilibrio en el Reglamento de e-Privacy